La sonda Curiosity, que despegó a bordo de un cohete no tripulado "Atlas 5" el pasado 26 de noviembre, ha aterrizado en Marte sin incidentes después de un viaje de 9 meses, 60 millones de kilómetros y un aterrizaje de "7 minutos de terror"
A las 7´30 (hora peninsular) la NASA informaba de que la misión Curiosity se ha posado en Marte después de los "7 minutos de terror" que finalmente se convirtieron en los "7 minutos de triunfo" según comenta el director científico de la NASA, John Grundsfeld.
El centro de control del JPL ha ido recibiendo señales que confirmaban la entrada en la atmósfera de la nave completa Mars Science Laboratory, el despliegue del paracaídas, el encendido de los retrocohetes para aminorar la velocidad y, al final, la operación de la grúa espacial que ha descolgado unos ocho metros el Curiosity hasta dejarlo en el suelo.
De pronto, silencio. La señal de entrada en la atmósfera indicaba que todo era normal, pese a que el aterrizaje ya había terminado, la señal de confirmación aún viajaba desde Marte hasta La Tierra. Este es el emocionante momento en el que se recibe la señal en el centro de control, "Estoy entero y a salvo en la superficie de Marte", indicó un mensaje en el blog de la NASA.
Durante los próximos años la sonda Curiosity realizara una expedición geológica hacia el cráter Gale, situado justo al sur del ecuador marciano, en el Monte de Sharp. Analizará los sedimentos de agua que en la cuenca del crater, donde los científicos creen que podrán encontrar evidencias de que Marte tuvo en algún momento de su historia el potencial biológico para albergar vida similar a la terrestre.
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